El ejercicio durante el aprendizaje

“Una actividad suave en intensidad implicará niveles de excitación psicológica bajos pero notables, lo que ayudará a preparar al cerebro para la entrada de nueva información, y para la codificación de dicha información en recuerdos”, dice Schmidt-Kassow.

El ejercicio durante el aprendizaje resulta efectivo.

El efecto beneficioso probablemente responde a la suavidad del ejercicio. Un ejercicio demasiado enérgico puede estimular en exceso el cuerpo y el cerebro, monopolizando todas las fuentes de atención cerebrales y dejando poca energía para la creación de recuerdos sólidos.

En opinión de Walter Bixby, profesor asociado en la Elon University de Carolina del Norte, “si tienes un examen en pocas horas, probablemente lo harás mejor si permaneces sentado y tranquilo. No obstante, si el examen es al día siguiente, no te hará mal estudiar mientras estás activo”. Y si esa actividad física es suave, probablemente te ayude en los resultados del examen.

Hay que hacer ejercicio, pues, pero sin pasarse.